Desde hace casi dos siglos que la organización de la educación en Chile dio sus primeros pasos, con el objetivo de dejar atrás las épocas de analfabetismo e incurrir en los caminos de la innovación. Hoy en día, la educación de calidad es uno de los pilares fundamentales para la evolución de cualquier sociedad.
Sin embargo, luego de que organizar esfuerzos en la materia, empezó a surgir una nueva problemática: las diferencias en el rendimiento entre los alumnos de distintos sectores y la segregación. De ahí la importancia de la educación inclusiva.
Pero, ¿Qué es la inclusión educativa?
Se trata de un enfoque en el cual todas las personas pueden ejercer el derecho a la educación sin distinciones de raza, cultura, género, religión, necesidades educativas especiales o nivel socioeconómico.
Entender qué es la inclusión educativa es clave para la apertura de espacios e instancias que permitan garantizar un aprendizaje efectivo para todos los miembros de la sociedad y, a su vez, determinante para la calidad de vida.
Importancia de la educación inclusiva
Ahora bien, aunque la educación es un derecho que tienen todos los seres humanos sin importar sus características personales, lo más importante de la inclusión educativa es que los estudiantes tienen la libertad de elegir dónde estudiar. Esa es una de las claves.
Por ejemplo, si los padres de un niño con necesidades educativas especiales deciden integrarlo al sistema educativo a través de una escuela especial, pueden hacerlo. No obstante, el niño tiene las mismas oportunidades de integrarse en cualquier tipo de escuela sin sufrir segregaciones.
Otra de las claves de la inclusión en materia de educación, es que las oportunidades que se brinden sean de calidad.
Un claro ejemplo de lo anterior lo constituyen las diferencias socioeconómicas: mientras más recursos se tengan, mejor es la educación a la que se puede acceder. Eso, en lo que a inclusión respecta, es una gran barrera para homologar oportunidades.
Para enfrentar esta situación, surge el lazo entre competencias docentes y educación inclusiva, entendiendo que el nivel de formación que tenga un estudiante, también es clave para saber cómo potenciar su desarrollo.
Relación entre competencias docentes y educación inclusiva
Bajo este marco nace la importancia de formar profesionales capaces de comprender las particularidades de cada estudiante (económicas, sociales, étnicas, etc.) y de emplear su autonomía para entregar una educación de calidad a toda la población estudiantil.
Las personas pertenecientes a diferentes grupos tienen formas de interactuar y comunicarse que no siempre coinciden con la forma en que se imparte la educación tradicional, lo que puede generar problemas de atención y de rendimiento.
Por lo anterior, los docentes deben tener la capacidad de ejecutar prácticas pedagógicas que difieren del «estándar», mientras potencian los saberes adquiridos previamente y, a partir de esto, generar nuevos conocimientos que resulten pertinentes y significativos.
Aquellos educadores que deseen impartir una educación inclusiva, pueden desarrollar estas capacidades a través de los postgrados de la UNAB.
Para ello, se presenta el Curso Abordaje Interdisciplinario de Niños, Niñas y Adolescentes con Trastorno del Espectro Autista, orientado a formar profesionales altamente capacitado para trabajar con estudiantes con TEA.
Además, la UNAB ofrece el Diplomado en Educación y Rehabilitación para Niños con Necesidades Educativas Especiales, el cual permite a los docentes entregar el apoyo necesario para que los niños, niñas y adolescentes con necesidades educativas especiales, puedan desarrollarse bajo las mejores condiciones posibles.
Entendiendo la importancia de la educación inclusiva, la UNAB ha creado programas especialmente orientados hacia la formación de profesionales capacitados en la materia, pudiendo optimizar el aprendizaje de las personas con necesidades especiales.